jueves, 3 de octubre de 2013

La BIROME y el CASSETTE

¿Será nomás la birome un invento argentino, o ese es otro invento de los que pretenden que TODO sea un invento argentino?...  Igual se supone que debe decirse bolígrafo porque birome es una marca.  ¿Pero alguien vió alguna vez una birome marca Birome?

La cuestión es que ahora hay cientos de bolígrafos (o biromes):  Con capuchón, rebatibles, las que llevan impresa una marca y se usan como publicidad, etc.  Pero antes estaba solamente la Bic tradicional azul con capuchón blanco -que sigue siendo la mas usada en éstos días- y la azul de trazo fino amarilla con capuchón azul, que me parece que no se fabrica más porque hace rato que no la veo (habría que agregar la negra, roja y hasta verde)

En rigor había otra aparte de la Bic que era la Sylvapen que venía amarilla con capuchón azul, pero nunca ganó la pulseada y creo que tampoco se fabrica más...  ¿Por qué?  ¡Porque la Bic tenía otros usos aparte de escribir!

La Bic no es completamente cilíndrica sino ligeramente hexagonal, y entraba justito en los carretes de los cassettes, por lo que era ideal para rebobinarlos y no gastar las pilas del Walkman cuando andabas por la calle. (Uso el tiempo pasado porque si bien los cassettes existen y se siguen usando -o por lo menos yo los uso- ya es difícil encontrar alguien con un Walkman)







El recurso no era considerado una 'tacañería' ni mucho menos.  Las pilas eran (son) caras, y una rebobinada de más podía dejarte sin escuchar completo el TDK recién grabado en la casa del amigo que tenía un combinado pistero y muchos discos que vos no te habías podido comprar.

Los recién iniciados sostenían el cassette con una mano y giraban la birome con la otra, pero al experto le alcanzaba con una  mano haciendo girar el cassette como una matraca, enrollando mas rápido la cinta...  Por sencillo que parezca el método tenía sus riesgos:  Cuando pensabas que más clara la tenías te pasabas de rosca con la velocidad y el cassette salía volando.  Más de una vez lo tuve que ir a buscar entre los pies del que estaba sentado en el colectivo dos asientos delante mío.

Pero a nadie le llamaba tanto la atención.  El rebobinado manual de cassettes en medios de transporte y la vía pública era una pintura habitual del paisaje urbano.

Y si la birome es o no un invento argentino te lo debo, pero me arriesgo a decir que éste legendario método...  ¡Sí lo es!


8 comentarios:

Miguel Angel Godoy (Lifeson Rush) dijo...

No dudo en absoluto de que esta "modalidad" fuera un invento argentino, lo que si es cierto es que era el metodo mas habitual para rebobinar cintas de cassette y yo en particular lo usaba muy a menudo ( de hecho de vez en cuando lo hago) ya que aun poseo una gran coleccion de cassettes.
Muy bien articulo, me has (nos ) recordar viejos y buenos tiempos.

Martín M dijo...

Excelente post!!

Aldo dijo...

Lifeson: Hermosos tiempos! gracias y un abrazo

Martin: Gracias, un abrazo!

Frodo dijo...

Soy de los que vivieron su adolescencia entre el declive del casette y la aparición de los cds, por eso me considero de los inexpertos que rebobinaban ayudándose con la mano.

buena entrada

Saludos!

Daniel dijo...

Si lo habré hecho. Y cuando se rompía la cinta la pegaba con cinta scotch.

Antoni dijo...

No se cuantas veces habré utilizado este truco, pero funcionaba de verdad.
Buen post. Un saludo.

Aldo dijo...

¡Un recurso muy usado en muchas partes del mundo por lo que veo, ja ja!.. Me alegra haberles traído un buen recuerdo.. Saludos!

Unknown dijo...

Pleno 2018 y me veo obligado a hacerlo porque las pilas siguen caras jajaja. En realidad hace poco tengo un walkman, pero no puedo evitar amarlo. Tengo muchos cassettes de mis viejos y vivíamos usandolos cuando yo era chiquito (21 actualmente). Un dia evite que los tirarán todos a la basura y me agradezco por eso jajaja Y la verdad que el sonido es mágico, es una ecualización propia de los cassettes. Y el plus de ese sonido analógico (analog fuzz) que es comparable al efecto de "filtro" que las cámaras analógicas generan en las fotos, o a la sensación de acelerar un Chevy setentoso en comparación con un auto actual, me encanta. Aparte, el hecho de armar las propias mezclas es genial. Que Spotify ni Spotify!