sábado, 5 de enero de 2013

ORNETTE COLEMAN, El Jazz que se viene...

Por supuesto que un disco definitivo de Free Jazz es precisamente el 'Free Jazz' que grabó el saxofonista Ornette Coleman en 1960 (publicado en 1961) con un doble cuarteto de baterías, bajos, trompetas, clarinete y saxo...  ¡A un cuarteto por cada canal del estéreo!

Pero si no tenés un día de esos como para entrarle de lleno a los 37' de 'improvisación colectiva' del único track del disco, hay un Coleman (un poco) más amable en el también fundamental 'The Shape of Jazz to Come' ('La forma de Jazz por venir' o 'El Jazz que se viene') de apenas un par de años antes...




Ese está hecho con un solo cuarteto -batería, bajo, trompeta, saxo- y por supuesto sin piano, el instrumento que podría limitar la libertad absoluta de los solistas...  Y no hace falta avanzar mucho para enamorarse de 'Shapes':  Con los dos primeros temas te enganchás y cuando te querés acordar lo escuchaste completo y lo ponés de nuevo.

'Lonely Woman' tiene esa melodía imposible y perfecta entre el saxo y la trompeta de Don Cherry, y 'Eventually' también, pero a mil por hora, anticipando un poco lo de 'Free Jazz'...  Los 9' de 'Peace' traen justamenta algo de paz, y en el lado B original están 'Focus on Sanity', 'Congeniality' y 'Chronology'.  La banda se completa con Charlie Haden en contrabajo y Billy Higgins en batería.

En una de sus editoriales para la recordada revista 'La Mano', su director Roberto Pettinato -que sacó sus propios discos además de tocar el saxo en Sumo- cuenta que una vez estuvo en camarines después de un show de Ornette Coleman, y le pidió que le muestre el saxo esperando ver algún detalle que devele el secreto de su increíble sonido...  Pero no encontró  nada.



4 comentarios:

Gonzalo Aróstegui Lasarte dijo...

Es un disco magistral, no tan radical como "Free Jazz", pero muy innovador. Coleman daba una importancia enorme al sonido, y esto es algo muy importanate para comprender su música y casi diría que todo el jazz desde el bebop en adelante.

Saludos, Aldo.

TSI-NA-PAH dijo...

Muy buena la anecdota de Roberto Pettinato!
A+

Fernando Moran dijo...

Que se nombren al Señor Ornette Coleman y al imbécil que tocó en sumo en la misma nota es un símbolo de la degradación moral de los tiempos que corren. A petinato hay que sacrificarlo para que deje de sufrir. Escuchen a Ornette a ver si se les va la bobera.

Aldo dijo...

Gonzalo: Te deseo un feliz año, y por supuesto estoy de acuerdo con vos!

Tsi: Claro, me acordé justo a último momento, muy buena eh! Abrazos

Fernando: No sé si será para degradación moral, pero por las dudas voy a escuchar a Ornette como decís, aunque en mi caso la bobera ya no creo que se me vaya..